Al final, todos somos iguales
Las prácticas científicas de investigación sobre los cuerpos no es algo nuevo, el ser humano siempre ha tenido interés por saber qué tenemos dentro y cómo funcionamos. En esta línea obras como la de Rembrandt Anatomy lessons o toda la serie de dibujos de anatomía de Leonardo da Vinci son ejemplos vigentes de ese interés.
En la mesa de disección
Partiendo de la idea de la visceralidad del arte y la incógnita de su procedencia, nada mejor que abrir en canal al propio artista para ver, in situ, qué tiene dentro, descubriendo que tiene lo que todos, nada anatómicamente nos diferencia pues la carne es carne. La sola idea de la disección del propio autor de la obra nos habla de su interés por profundizar en las cuestiones del arte y su origen.
Bajo la piel
Esta pieza está realizada en cerámica esmaltada que se configura a modo de puzzle o modelo anatómico tridimensional, mostrando al retratado, el propia artista, a escala natural generando un diálogo de igual a igual con el espectador. En definitiva esta obra nos conecta con nuestro yo más profundo; el que está bajo la piel que vemos a diario.


Vistas de la pieza




